Un estudiante medio genera potencialmente casi dos kilos de basura al día. Además, las escuelas generan miles de kilos en botellas de agua de plástico, cuadernos de papel, latas de aluminio y envases de cartón para alimentos.
Es un ciclo que no parece tener fin, pero los estudiantes de FCCLA de Timpview John Mackay, Melanie Olivas y Rachel Ryu han decidido romperlo. ¿Cómo? Eligiendo reciclar.
Para los que no estén familiarizados, Family, Career, and Community Leaders of America (FCCLA) es una organización de estudiantes de carreras profesionales y técnicas que funciona como parte integral del plan de estudios de educación en Ciencias de la Familia y del Consumidor y opera dentro del sistema escolar. Mientras que los asesores gestionan, dirigen y aconsejan a los estudiantes, los estudiantes de FCCLA se encargan del marketing, la organización y la realización de proyectos basados en el servicio como éste.
John, Melanie y Rachel se embarcaron en su proyecto FCCLA después de darse cuenta de la ausencia de un sistema formal de reciclaje en las instalaciones de Timpview. Su objetivo inicial: introducir una opción reciclable cerca de los contenedores de basura y concienciar a la población mediante una campaña de marketing para apoyar sus esfuerzos.
Los tres desarrollaron una serie de puntos de contacto para aumentar la concienciación, despertar el interés y llamar a la acción a sus compañeros. En primer lugar, el trío colocó estratégicamente cajas de reciclaje en todo el campus y utilizó carros prestados para facilitar el acceso de los estudiantes y una recogida eficaz. A partir de ahí, aprovecharon los anuncios matinales para concienciar a los estudiantes. A continuación, redactaron artículos en la web y publicaron mensajes en las redes sociales para implicar a la comunidad escolar. Por último, estos estudiantes colaboraron con los administradores y funcionarios del distrito para apoyar a la comunidad en la puesta en práctica de sus esfuerzos. (Este artículo, de hecho, es el fruto de sus esfuerzos; sus contactos con fuentes del distrito dieron lugar a este mismo artículo).
John, Melanie y Rachel no dejaron piedra sin remover, ni recurso sin explotar, ni espacio para nada que no fuera el éxito. Alumnos y profesores se unieron a la causa. Lo que empezó como una iniciativa de los alumnos pronto se convirtió en un movimiento de toda la escuela, con participantes entusiastas deseosos de contribuir a un mañana más verde. Al final, su centro empezó desde abajo, con una tasa de reciclado de 0%, hasta alcanzar una media de dos a tres bolsas de 55 galones por semana, todo ello gracias a una campaña específica.
Es el tipo de iniciativa que puede llevar meses de planificación por parte de los poderes del distrito; ralentizar el proceso cíclico para implantar un cambio generalizado requiere tiempo y esfuerzo. Y, sin embargo, estos tres estudiantes tomaron la iniciativa de romper con la norma y empezar algo nuevo, demostrándonos que nunca es demasiado tarde para cambiar nuestras costumbres a mejor.
Invitamos a los padres, profesores, estudiantes y administradores a unirse a nosotros en nuestros esfuerzos de reciclaje. Vamos a cambiar el rumbo de los residuos y allanar el camino para un futuro más sostenible para Timpview High School y las escuelas en todas partes.
Con el mismo espíritu de su proyecto, te invitamos a pasar a la acción. He aquí cómo puedes ayudar:
Busca las cajas de reciclaje etiquetadas en el colegio y haz del reciclaje parte de tu rutina diaria.
Comparte nuestra iniciativa en las redes sociales e inspira a otros a unirse a la causa.
Póngase en contacto con nosotros si desea formar parte de nuestro equipo de reciclaje o si tiene ideas para mejorar nuestros esfuerzos.
La iniciativa de reciclaje de John, Melanie y Rachel no consiste sólo en recoger latas y papeles, sino en fomentar una cultura de responsabilidad medioambiental y compromiso comunitario. Su viaje nos ha demostrado que pequeñas acciones pueden conducir a un cambio monumental, y es un viaje del que todos podemos formar parte. Agradecemos a nuestros alumnos sus esfuerzos y esperamos con impaciencia lo que les depare el futuro.