Este artículo ha sido escrito por Mazie Smith, becaria de comunicación de Provo High.
En el torbellino de la vida en la escuela secundaria, es fácil quedar atrapado en el ajetreo y el bullicio de los académicos, extracurriculares y eventos sociales. Sin embargo, en medio de este torbellino de actividades, no se debe pasar por alto una oportunidad de crecimiento, servicio y liderazgo: la Sociedad Nacional de Honor (NHS).
Durante décadas, el NHS ha sido un faro de excelencia académica, servicio comunitario, desarrollo del liderazgo y formación del carácter en los institutos de todo el país. No es solo un club; es una puerta de entrada para liberar todo tu potencial y marcar una diferencia tangible en tu escuela y tu comunidad.
Tuve el privilegio de presenciar de primera mano el increíble trabajo y dedicación de los miembros de la Sociedad Nacional de Honor de Provo High School. Desde la organización de recaudaciones de fondos hasta la creación de sinceros gestos de agradecimiento para los profesores, e incluso la elaboración de mantas para los hospitales, el espíritu de servicio y camaradería dentro de la NHS fue realmente inspirador.
Una de esas actividades inspiradoras fue la recaudación de fondos para la escuela mediante la venta de flores. Los miembros de NHS trabajaron incansablemente para organizar y ejecutar este evento anunciando la recaudación de fondos a otros estudiantes de Provo High, recogiendo pedidos para las flores durante sus horas de almuerzo, comprando las flores a un vendedor, y preparando y entregando los pedidos a los estudiantes correctos. Esto demostró sus habilidades empresariales y dedicación para apoyar a su comunidad escolar. Fue conmovedor ver a los estudiantes unirse para contribuir a una causa mayor que ellos mismos, mientras se divertían y difundían alegría.
Los carteles de agradecimiento a los profesores creados por los miembros de la NHS fueron otro testimonio de su gratitud y respeto por los educadores que se dedican incansablemente a formar las mentes jóvenes. Unirse a la NHS no es sólo añadir una línea a la solicitud de ingreso en la universidad, sino abrazar una cultura de excelencia, servicio y liderazgo. Se trata de desarrollar habilidades esenciales para la vida, forjar amistades para toda la vida y dejar un legado positivo en tu escuela y en tu comunidad.